Angelo


En Colombia es muy común escuchar que los gorditos son felices pero la verdad nunca me he sentido mejor que ahora que me he librado de ese problema. Más o menos en junio del año 2007 me contacte con el doctor Andrés Ospina y el me ofreció una alternativa para dejar mi obesidad a un lado definitivamente lo que me llenó de mucha esperanza pues había intentado toda clase de dietas, gimnasios y demás para siempre lograr resultados mínimos y desmotivantes.
Me presente ante el doctor con casi 130 kilogramos de peso lo que era exagerado para mis 1,77 cm he inmediatamente me convertí en candidato para una cirugía de bypass gástrico. Dos meses después me encontraba en el quirófano para mandar esos kilos de más al olvido y desde ese momento empezó un proceso en mi cuerpo que parecía increíble.

Lo primero es que prácticamente 2 días después de la operación estaba en la calle llevando mi vida normal y semana tras semana la gente que me encontraba notaba cambios impresionantes en mi apariencia. 

A pesar de que la alimentación los primeros días es mínima el procedimiento realizado por los doctores 
hacía que mi ansiedad fuera nula totalmente diferente a lo que ocurre en una dieta en la que uno debe luchar contra la necesidad de estar comiendo todo el tiempo. A los 6 meses de mi operación tenía que cargar con 52 kilogramos menos lo que es impresionante pues ese es el peso normal de un joven de 15 años y no puedo creer que viví tantos años con tantas dificultades al respirar, al desplazarse, al jugar con mis hijos y al trabajar.

Hoy compro la ropa que me gusta y no la que me toca, deje de roncar que era una gran problema para mi carrera de cantante, puedo correr, me levanto renovado cada día y me siento feliz con mi apariencia. Pase de 130 kilos a 78, de talla 44 de pantalón a talla 32 y talla XXL de camisa a tallas lo que parecía una utopía pues la última vez que estuve en esas tallas tenia más o menos 13 o 14 años. La gente me dice que me quiete varios años de encima y yo sé que esos años se los estoy agregando a mí expectativa de vida y lo más importante mis hijos tienen hoy un papa saludable con la presión arterial de un jovencito dejando atrás el temor de un problema cardíaco causado por el sobrepeso que era un temor que rondaba mi vida todo el tiempo.

Mi eterna gratitud al doctor Andrés Ospina y su equipo por generar un cambio en mi vida que hoy está llena de energía, de esperanzas y de alegría.    - Angelo.